El diputado Solanas advirtió: “Repudiamos la represión contra los vecinos que luchan por el agua y la vida y hacemos responsable al gobierno catamarqueño por ir contra los intereses de este pueblo luchador que ha demostrado que no hay consenso para la instalación de estos mega-proyectos de saqueo y contaminación. Todos los argentinos y la dirigencia política deben apoyar la lucha de los andalgalenses.”
Luego agregó: “Los vecinos, en un gran acto de lucha, coraje y concientización, ha demostrado no sólo los devastadores efectos sobre la salud y el medioambiente que traen estos proyectos de minería a cielo abierto, sino que han hecho evidente el fracaso de la política del saqueo minero, que en más de 10 años de Minera Alumbrera, tienen a la provincia tan pobre y carente de infraestructura y servicios básicos como antes. ¿Quién se quedó con los millonarios beneficios de esa explotación?”
Desde el viernes pasado, cuando la fiscal Martha Nieva se hizo presente para comunicar la orden de desalojo, los asambleístas se mantuvieron al costado de la ruta, en un campo perteneciente a un miembro de los autoconvocados, y afirmaron que no permitirían pasar camiones y maquinaria de la empresa minera. Pero este mediodía, la empresa avanzó con su equipamiento hacia la zona del corte, acompañada por móviles policiales, mientras se iban levantando retenes a lo largo del camino, que provocan el aislamiento en la zona de represión.
Una vez frente a los asambleístas, que no permitieron el paso de la maquinaria, actuaron las fuerzas represivas, con gran cantidad de miembros de infantería, con balas de goma y gases lacrimógenos, que ocasionó varios heridos y más de 15 detenidos, entre otros, el profesor Mario Pacheco, Raúl Martínez, Patricia Álvarez de Figueroa, Teresita Nieto, el ingeniero del INTA, Juan Colica, y el comerciante Flabio Verdel.
El diputado Solanas había visitado la ciudad el viernes pasado, luego de sufrir agresiones por parte de estudiantes de la carrera de minas de la Universidad Nacional de Catamarca. Allí, presenció una masiva movilización contra la minería a cielo abierto, y luego proyectó su último film “Oro Impuro” en la plaza central de la ciudad, con grandes pantallas y más de mil espectadores. Entonces, hablando para todos, manifestó que "cuatro mil personas, cuatro cuadras abarrotadas de vecinos, demuestran a las autoridades locales, provinciales y nacionales, que no hay consenso para la instalación del proyecto de Agua Rica".
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